En cabello húmedo: un plus de nutrición, reparación e hidratación.
Aplicar unas gotas de producto en la palma de la mano, dependiendo de la longitud y grosor del cabello. Distribuir sobre el cabello húmedo, previamente secado con una toalla. Se absorbe instantáneamente. No es necesario aclarar.
En cabello seco: un extra de suavidad, brillo y vitalidad.
Unas pocas gotas bastan para conseguir el control deseado, un excelente brillo y un acabado perfecto. Repartir el producto en medios y puntas con las manos y finalizar el proceso de peinado de la forma habitual. Una dosificación es suficiente para obtener un acabado perfecto. No deja residuos.