Una piel sensible es una piel sana, pero que se caracteriza por reaccionar de manera más rápida y con mayor intensidad a ciertos estímulos externos. Como ya hemos comentado en otros
posts, la inflamación es la reacción más habitual en las pieles sensibles. Un mecanismo de autodefensa que se activa cuando la piel recibe una agresión. Esta reacción puede manifestarse en forma de rojez, dolor, calor, hinchazón y/o irritación; o bien silenciosa, y va dañando los tejidos dérmicos (inflamm'aging).
Para los cuidados para la piel sensible presentamos el tratamiento S.O.S. Pieles Sensibles, específico para aportar confort a las pieles sensibles y/o sensibilizadas. Es la solución profesional para reparar, calmar y regenerar las alteraciones típicas de las pieles sensibles e intolerantes.
Cosas a tener en cuenta:
- ¿A quién va dirigido?
- Pieles caracterizadas por una hiperreactividad a estímulos externos.
- Pieles con umbral de tolerancia disminuido.
- Pieles con fragilidad capilar.
- Pieles con tendencia a couperosis, rosácea y dermatitis.
- Pre-post procedimientos médicos.
- Acciones y beneficios
- Ayuda a prevenir el envejecimiento asociado a la inflamación crónica.
- Fortalece la piel minimizando el efecto dañino de las agresiones externas.
- Aumenta el umbral de tolerancia cutáneo.
- Combate y previene las rojeces en sus cuatro estadios de aparición.
- Preserva y aumenta la hidratación cutánea.
- Aporta confort y bienestar a las pieles delicadas y frágiles.
- Hipoalergénico, sin perfume.
- ¿Qué activos posee?
- Tecnología NEURO-TOLERANCE +
- Pigmentos correctores de interferencia
- Aloe Vera
- Sinergia de lípidos vegetales (Mango y Karite)
- Fracciones específicas de ácidos grasos del aceite de Coco
- Ácido Hialurónico
- Alantoína
- a Bisabolol
- ¿Qué necesitas para realizar el ritual?
- Luz tenue e indirecta
- Música relajante
- Boles y pinceles MONTIBELLO
- ¿Cuánto dura? ¿Cada cuánto es aconsejable realizarlo?
- Tratamiento de shock de 4 sesiones: 1 sesión semanal.
- Duración de la sesión: 50 min.
- Algunos consejos prácticos
- Aplicar cosméticos adecuados aumentando paulatinamente la tolerancia de la piel para conseguir que sea menos vulnerable a los agentes externos.
- Utilizar cosméticos idóneos: tónicos sin alcohol, leches limpiadoras hidratantes y pulverizar con agua termal.
- Evitar alimentos picantes y alcohol ya que tienen un efecto vasodilatador.
- Evitar las exposiciones prolongadas al sol.
- Evitar los cambios bruscos de temperatura y de humedad ya que pueden ocasionar en la piel procesos de vasodilatación y vasoconstricción simultáneamente.